Entraron en vigencia este sábado los nuevos precios de los combustibles dispuestos por el Ministerio de Industria y Comercio (MIC), que la entidad atribuye a los fuertes e incontenibles incrementos en el mercado internacional del crudo y sus derivados, aunque esta semana experimentaron leves bajas ante una jornada de fortalecimiento del dólar y escasas operaciones.
La Dirección de Comunicaciones del MIC informó que para la semana del 22 al 28 el galón de gasolina premium se cotizará a RD$182.90, para un aumento de RD$2.80, en tanto que la gasolina regular costará RD$172.80 por galón para un incremento de RD$2.50.
En ese mismo orden, el gasoil regular se venderá a RD$157.00 por galón para un alza de RD$3.00, lo mismo que el gasoil premium, el cual a partir de este sábado costará RD$162.60 por galón para un aumento de RD$3.00. El galón de Avtur costará RD$130.44, para un aumento de RD$3.17 y el Kerosene se venderá a RD$148.30 por galón para un aumento de RD$3.20.
El fuel oíl se cotizará a RD$109.29 , que es el mismo precio de la semana pasada. Mientras que el gas licuado de petróleo (GLP) costará RD$93.80 por galón para un aumento de RD$1.28. El gas natural (GNL – GNC) se venderá a RD$18.94 por metros cúbicos.
Con los aumentos aplicados esta semana por el Ministerio de Industria y Comercio, serían cuatro semanas consecutivas en las cuales los precios de los combustibles se han incrementado en forma considerable.
Quiérase o no, la nueva alza en los precios de los combustibles decretada por el gobierno dominicano tendrá consecuencias negativas para todos los sectores de la vida nacional, sobre todo como ha sido siempre, los más empobrecidos y necesitados de nuestra sociedad.
La peor consecuencia de esta nueva alza será el inexorable aumento de todos los precios de los productos de la llamada canasta familiar, todos productos de primera necesidad, lo que viene a elevar aún más el alto costo de la vida de los dominicanos.
Los estudiosos y expertos en asuntos económico plantean que el alto o bajo costo de la vida de una nación depende del estado de crecimiento o no de la economía, ya que se supone que si logra un crecimiento importante entonces los precios de los productos tendrán que bajar, pero en nuestro país, no obstante los anuncios con bombos y platillos de parte del gobierno sobre un supuesto crecimiento de nuestra economía, los precios de los productos de primera necesidad siguen creciendo vertiginosamente en detrimento, claro está, de la población de menor ingreso.
A nuestro alto costo de la vida tenemos que agregarle el creciente aumento del desempleo que se produce no obstante el tan cacareado aumento del supuesto crecimiento de nuestra económica, pregonado por el gobierno con fines eminentemente electoreros.
La población se muestra irritada porque sabe perfectamente que nada bueno le espera con estas funestas medidas tomadas por el gobierno, por lo que la reacción y protestas no se dejarán esperar.